Cuando se trata de un superventas, su lanzamiento puede tomar proporciones épicas. Se trata de la nueva generación del SUV más grande de la casa coreana, que desde San Pedro de Atacama, comienza a preparar grandes expectativas de ventas para gran parte de los mercados de la región.
Como si se tratara de una peregrinación, San Pedro de Atacama estuvo tomada por tres días por más de 100 invitados -entre periodistas, distribuidores y ejecutivos de la marca provenientes de más de 12 países- para el lanzamiento regional de la nueva Hyundai Santa Fe.
La caravana de vehículos, que superaba el kilómetro y medio de longitud, se movió por distintos caminos desérticos para probar la cuarta generación de este SUV, el más grande de la familia de utilitarios deportivos de la marca coreana, y que en Chile ha superado las 37.500 unidades en los 18 años de venta que lleva en el país.
Llama la atención la renovación del diseño tanto exterior como interior. Por fuera, se ven estos cambios especialmente en la máscara frontal y los faros, que le dan un aspecto más imponente. Por dentro, se cuidó la experiencia del usuario con un concepto orientado en los ocupantes. En cuanto a tamaño, es más ancho y más largo.
El modelo está disponible en 11 versiones que van desde los $16.990.000 a los $28.490.000. Seis versiones son a gasolina (2.4 lts, 170 hp y 225 Nm) asociados a cajas manual o automáticas de seis marchas y cinco con motor diésel (2.2 lts, 197 hp y 440 Nm), que pueden llevar caja manual de seis marchas o automática de 8 velocidades. En ambos casos se puede elegir tracción simple o 4WD.
“Estamos muy contentos de poder estrenar nuestro nuevo SUV All New Santa Fe, cuyo diseño y tecnología de vanguardia serán preferidos por nuestros clientes al igual que sus predecesores. Esperamos poder comercializar, aproximadamente unas 2.400 unidades al año con el fin de continuar siendo un referente en la categoría SUV”, señaló Máximo Morel, gerente División Automotriz Grupo Gildemeister.
El concepto tras esta nueva generación del Hyundai Santa Fe es lo que los coreanos llaman “Calm Tech”. Es decir, la incorporación de una serie de nuevas tecnologías para el conductor, sin que estas cambien de forma disruptiva su andar. Entre ellas se encuentran el sistema Safe Exit Assist, que detecta si otro auto viene desde atrás y bloquea las puertas traseras para que los niños u otro pasajero. O el Rear Occupant Alert, que tiene un sensor para los ocupantes traseros, y avisa al conductor si alguien se quedó dentro del auto. Este sensor también vale para la mascota.